Y es que en la Freinetschool de Boomgard se realiza cada año una simulación de matrimonio, en que los niños son incentivados sobre la enseñanza del matrimonio, y esta es la primera ocasión en que dos niños del mismo sexo practican esta actividad de la escuela, que generalmente se realizaba entre un niño y una niña. A través de esta práctica los niños son motivados a tomar sus propias decisiones en libertad.
Los pequeños se intercambiaron pulseras de la amistad; Tito y Otto son mejores amigos y vieron natural dar el paso de casarse. La televisión y la prensa local cubrieron el evento: los dos amigos, tomados de la mano, bajaron las escaleras mientras sus compañeros lanzaban pompas en lugar de arroz.
"Esto no tiene nada que ver con la homosexualidad", asegura su profesora, Lies Van Maldergem. Pero la sociedad belga, que legalizó el matrimonio gay en 2003, no lo ha visto así. El foco mediático ha destacado el ejemplo de integración que supone que, trece años después, estas uniones sean asumidas con naturalidad incluso por los más pequeños.
"Estaban muy emocionados. No han hablado de otra cosa durante semanas" - declaró la madre de Otto a Het Nieuwsblad. "Se trata de una experiencia divertida, de algo que recordarán cuando sean mayores y decidan casarse, ya sea con un hombre o una mujer".
Cabe mencionar que Bélgica es un referente internacional para los derechos de los homosexuales. Uno de sus hitos ha sido el de tener al que por el momento ha sido el único primer ministro abiertamente gay: Elio Di Rupo, que dirigió el país de 2011 a 2014.
A continuación te dejamos un link donde puedes ver un pequeño vídeo de la noticia en Bélgica:
2 niños entrañables se dan el si en sus votos matrimoniales
2 niños entrañables se dan el si en sus votos matrimoniales
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